El diputado canarista pide a sanidad transparencia absoluta en la práctica
de la “receta deportiva” que puede generar intrusismo profesional e
inseguridad a los pacientes
El diputado de Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC) por las islas de
Lanzarote y La Graciosa, Yoné Caraballo, ha transmitido hoy martes a la
consejera de sanidad, Esther Monzón, su preocupación por el mecanismo de la
“receta deportiva” que anunció conjuntamente las consejerías de sanidad y
educación del Gobierno de Canarias en el mes de enero.
Para Caraballo, que se ha reunido con el Colegio Profesional de
Fisioterapeutas, “la idea de la receta deportiva presenta muchas dudas en
el ámbito sanitario puesto que no sabemos de qué se trata realmente, si de
un método de prevención o terapéutico”. Prosigue el diputado que, “si se
trata de una receta de prevención, donde los médicos de familia indican al
paciente una determinada actividad física como caminar o pilates, eso ya se
lleva haciendo desde hace tiempo con iniciativas como las caminatas
saludables”. Sin embargo, resalta, “si se trata de una receta terapéutica
la cosa cambia, puesto que estaríamos infiriendo en la actividad
profesional de los fisioterapeutas y generando una inseguridad al paciente
al no ser tratados por profesionales en la materia”.
Así, para NC-BC, la alerta del colectivo de fisioterapeutas sobre una
posible “injerencia profesional” debe ser atendida por las consejerías de
sanidad y educación si pretenden seguir adelante con la idea de la “receta
deportiva”, colaborando con los profesionales, mejorando la propuesta
conjuntamente y haciéndoles partícipes en esta estrategia para,
fundamentalmente, dar seguridad al paciente.
“Los fisioterapeutas son un colectivo profesional fundamental en la mejora
de la salud de las personas, pero desgraciadamente, han estado olvidados e
infravalorados dentro del sistema de salud. La ratio existente en Canarias
está muy por debajo de lo que se recomienda, con 1 fisioterapeuta por 8.000
personas, cuando lo normal es 1 por 1.400 personas”, señala Caraballo, que
propone una mejora de estas ratios y la posibilidad de que el Servicio
Canario de Salud refuerce su plantilla de fisioterapeutas”.
“Una sociedad del cuidado debe ser una sociedad preventiva. Los
fisioterapeutas ejercen esa labor con técnicas diversas como la
hidroterapia o el ultrasonido, incentivan a las personas a ejercer
actividades grupales, diseñan entrenos y planifican terapias en función de
las patologías. Son un recurso sanitario de primer orden, más en una
Comunidad Autónoma como Canarias que apuesta por el deporte y el turismo
activo, y padece problemas de obesidad y diabetes”, sentencia Yoné
Caraballo.