El candidato de NC al Congreso el 23J apoya la implicación de las instituciones públicas con las empresas del ramo respetuosas con los convenios colectivos
El número uno al Congreso de los Diputados de Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC) en las elecciones generales del próximo 23 de julio (23J), Luis Campos, apostó por la cualificación y profesionalidad del sector de la seguridad privada, que en Canarias emplea a más de 14.000 personas. Campos y el candidato al Senado por Gran Canaria, Txema Santana, apoyaron la implicación de las instituciones públicas con las empresas del ramo respetuosas con los convenios colectivos.
Los candidatos de NC mantuvieron hoy una reunión con la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios de Seguridad (Aproser) de Canarias para conocer la situación y necesidades de un colectivo con “mucha responsabilidad”, según Campos, en uno de los atractivos turísticos más importantes del Archipiélago como es la seguridad. Además, representa más del 60% por ciento de los servicios de seguridad privada, vigilancia y transporte de fondos.
El cabeza de lista al Congreso de los Diputados de NC respaldó una de las principales peticiones de la asociación, con lo que se comprometió a defender el desarrollo del reglamento de la Ley de Seguridad Privada, aprobada en 2014. Una norma que aumenta las competencias de los vigilantes, aunque con límites, y regula un sector en auge bajo los principios de complementariedad y subordinación a la seguridad pública.
Luis Campos celebró la mayor feminización, cualificación y aportaciones de las personas que trabajan en el sector porque son “necesarias e imprescindibles”, como se demostró durante la pandemia del coronavirus.
Entre otras peticiones de la asociación, valoradas por Campos y Santana, destaca la referida a la mejora de la cualificación a través de itinerarios de Formación Profesional y la exigencia de que las instituciones públicas cuenten con empresas que respetan los convenios colectivos, en sentido amplio.
Nueva Canarias, añadió Luis Campos, defiende una sociedad con una cultura de la seguridad “potente”, en el plano público y complementado siempre desde el sector privado, “imprescindible” en este momento. También la garantía de la profesionalidad, la cualificación y el cumplimiento de los convenios colectivos.