Nueva Canarias muestra su apoyo al proyecto de la central de bombeo reversible de Güímar

La formación canarista de progreso subraya que esta iniciativa de restauración ambiental facilitaría el reto de aumentar el uso de energía renovable en Tenerife.

Nueva Canarias (NC) muestra su apoyo al proyecto de la central de bombeo reversible de Güímar al considerar que esta iniciativa de restauración ambiental facilitaría el reto de aumentar, de forma significativa, el uso de las energías renovables en Tenerife.

Tras la reciente reunión mantenida con los representantes del colectivo Salto a la Transición Ecológica en la sede insular que la formación canarista de progreso tiene en La Laguna, NC coincide con este colectivo en la apuesta por el modelo de central de bombeo reversible que se encuentra en estudio para el valle de Güímar al considerar que su puesta en marcha “acercará la posibilidad de cerrar las centrales térmicas y, con ello, se lograría un beneficio ambiental para toda la isla”.

El secretario de Implantación Territorial de Nueva Canarias, Valentín Correa, esgrime que la creación de esta central “que permite almacenar la energía renovable en forma de agua, al utilizar los excedentes de la eólica y solar para bombear agua hacia el embalse situado a una altura superior. Al ser reversible, puedes volver a dejar caer el agua e introducir, de esta forma, energía renovable en la red en cualquier momento que se requiera, comportándose, en este sentido, como generación eléctrica del tipo A”.

Correa abundó que este tipo de tecnología “ya se ha probado con éxito en Canarias. El Hierro, gracias a la central de Gorona del Viento, es la isla de mayor penetración de las  renovables en el archipiélago, al lograr el hito mundial de hacer funcionar su sistema eléctrico con energía 100 por ciento renovable durante 24 días seguidos”.

Del mismo modo, remarcó que esta infraestructura “supone una de las pocas posibilidades viables de restaurar uno de los mayores atentados ambientales que se han llevado a cabo en Tenerife, ya que las cavidades producidas por la extracción indiscriminada de áridos en el Valle de Güímar serían cubiertas por el agua. Esto no solo reduciría el impacto visual que presentan esos grandes hoyos en la actualidad, sino que serviría para producir energía limpia y hacer que Tenerife generase, a través de esa central de bombeo reversible, prácticamente un tercio de la energía que necesita en la actualidad. Todo son ventajas”, reiteró refiriéndose a la idoneidad del desarrollo de este proyecto.